La investigación reconoce los avances en la reducción del déficit fiscal, que de un 7.9% del PIB en 2013 disminuyó a 3.1% en 2015 y 2.8% en 2016.

Un informe  del  Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI)  y la Asociación Servicios Técnicos Legales y Económicos (SETELEC), indicó que Honduras ha logrado una reducción de su déficit fiscal, pero a cambio ha aumentado sus desigualdades sociales.

En el estudio  “Efectos Económicos y Sociales de la Política Fiscal Reciente en Honduras (2013-2016)”, que fue presentado con  la cooperación del programa Impactos de Counterpart International,  refiere que la reducción del PIB de 7.9% en 2013 a 2.8% en 2016, se da como consecuencia de un significativo aumento de los ingresos tributarios, de un mayor control del gasto y de una reducción de bienes públicos.

Sin embargo, también se destaca que dicha reducción ha profundizado la regresividad de la estructura tributaria y ha afectado las asignaciones a sectores importantes como salud y educación.

El documento apunta que el aumento de los ingresos tributarios se dio por medio de incrementos en impuestos indirectos, y que el crecimiento de los impuestos directos es menor, y las exoneraciones fiscales se han mantenido en niveles altos, y en algunos casos han aumentado.

El aumento de los impuestos en los tres primeros años del presente gobierno ha sido, en promedio, cerca US$495 millones  (2.5% del PIB de 2016), lo que ha hecho que la carga tributaria hondureña pase de 14.8% del PIB en 2013 a cerca de 18% en 2016, apunta  la investigación.

Se agrega, además, que al finalizar el 2017, el Gobierno Central habrá pagado en los últimos cuatro años alrededor de US$5,000 millones en servicio de deuda, equivalente al 25% del PIB de 2016, y a casi todo el presupuesto del Gobierno Central para 2017,  un aproximado de US$5,600 millones.

Sin embargo, también se destaca que dicha reducción ha profundizado la regresividad de la estructura tributaria y ha afectado las asignaciones a sectores importantes como salud y educación.

El documento apunta que el aumento de los ingresos tributarios se dio por medio de incrementos en impuestos indirectos, y que el crecimiento de los impuestos directos es menor, y las exoneraciones fiscales se han mantenido en niveles altos, y en algunos casos han aumentado.

El aumento de los impuestos en los tres primeros años del presente gobierno ha sido, en promedio, cerca US$495 millones  (2.5% del PIB de 2016), lo que ha hecho que la carga tributaria hondureña pase de 14.8% del PIB en 2013 a cerca de 18% en 2016, apunta  la investigación.

Se agrega, además, que al finalizar el 2017, el Gobierno Central habrá pagado en los últimos cuatro años alrededor de US$5,000 millones en servicio de deuda, equivalente al 25% del PIB de 2016, y a casi todo el presupuesto del Gobierno Central para 2017,  un aproximado de US$5,600 millones.